En nuestro viaje hacia el autoconocimiento y la sanación, a menudo buscamos respuestas en el exterior. Sin embargo, muchas veces, las claves para desbloquear nuestro bienestar se encuentran en las memorias más profundas de nuestro
En nuestro viaje hacia el autoconocimiento y la sanación, a menudo buscamos respuestas en el exterior. Sin embargo, muchas veces, las claves para desbloquear nuestro bienestar se encuentran en las memorias más profundas de nuestro ser.
Hoy te invito a explorar una práctica que combina la regresión al útero materno con el protocolo RAIN y la activación de la autocompasión, para liberar bloqueos y reconectar con tu esencia más pura.
El útero materno: nuestro primer hogar energético
Antes de las palabras, antes de las heridas, fuimos agua, sonido y pulso. Durante la gestación, no solo absorbemos nutrientes, sino también emociones, creencias y memorias transgeneracionales. Nuestro cuerpo recuerda, y el útero materno contiene huellas energéticas que pueden condicionar cómo nos manifestamos en el presente.
Investigadores como Thomas Verny y Gabor Maté han explorado cómo las experiencias prenatales afectan el desarrollo emocional y cómo los traumas tempranos pueden influir en nuestros patrones de comportamiento. Annie Murphy Paul, en su libro Origins, también profundiza en cómo el entorno intrauterino impacta en nuestra vida posterior.
RAIN: una práctica para transformar bloqueos inconscientes
El protocolo RAIN, desarrollado por Tara Brach, es una práctica de mindfulness que nos guía en el reconocimiento y liberación del sufrimiento emocional. Aplicamos este protocolo en la meditación para facilitar la sanación de memorias tempranas:
- R – Reconocer: Observamos lo que está vivo en nosotros ahora—sensaciones, pensamientos, emociones.
- A – Permitir: Damos espacio a estas experiencias sin luchar ni huir.
- I – Investigar: Exploramos con presencia amorosa, sin juicio.
- N – Nutrir: Nos ofrecemos autocompasión, con palabras y gestos de cuidado.
Esta práctica nos permite atravesar y transformar bloqueos inconscientes, facilitando una conexión más profunda con nuestro ser.
Autocompasión y reescritura celular
Después de reconocer y liberar los patrones, nos ofrecemos un gesto compasivo. Visualizamos que devolvemos al mar o al útero energético lo que no nos pertenece y reescribimos la historia celular con palabras de afirmación, amor y libertad. Este paso final permite restaurar equilibrio en nuestros centros creativos y abrir caminos de manifestación.
Kristin Neff, en su libro Self-Compassion, destaca la importancia de tratarnos con amabilidad y comprensión, especialmente cuando enfrentamos desafíos. Rupert Sheldrake también ha explorado cómo las memorias pueden ser reprogramadas, permitiéndonos liberarnos de patrones limitantes.
